Como ya sabemos ¡¡¡llegó la primavera!!! Que alegría y estamos listos para plantar nuestros almácigos.
Si no hiciste almácigos aún estás a tiempo. Aquí va el calendario de siempre, aunque no te relajes… ya pronto sólo tendremos que dedicarnos por completo a cuidar y esperar que a que crezcan para poder cosechar sus frutos.
En esta estación nos encanta observar ya que todo comienza a despertar. Muchas de tus hortalizas están comenzando a dar flores, las que nos ayudarán a llamar a los polinizadores y además al secarse nos dejarán sus semillas.
Preocúpate de ir fertilizando con té de plátano, cáscaras de huevo, borras de café, purín de ortiga, entre otros.
En el caso de las arvejas, porotos verdes y tomates no olvides poner tutores desde el inicio ya que estos cultivos necesitan soporte.
Ya es momento de aumentar el riego, las temperaturas aumentaron y nuestras hortalizas necesitan hidratarse (mañana y noche en horarios en que la tierra esté fría).
Ir desmalezando. Ojo con “malezas” como el diente de león que está en todo su esplendor ya que permite que sus flores amarillas atraigan a polinizadores… Por tanto, no es “maleza”, sino que más bien “bueneza”. No la saques a no ser que esté invadiendo alguno de tus cultivos.
Si quieres disminuir las malezas, aprovecha el riego y evita que se evapore el agua más rápidamente manteniendo la tierra fría. Para esto en cada espacio libre entre tus cultivos pone mulch.
Con el aumento de las temperaturas, las plagas también salen a disfrutar de la primavera. Recuerda ir haciendo control preventivo (por ningún motivo apliques químicos a tu huerta). Siempre hay una manera de convivir o de espantar a las plagas.
Planta rosales. Aquí llegan los pulgones rápidamente. Recuerda que su depredador natural son las chinitas así es que pronto llegarán a comérselas. Donde hay chinitas, hay un buen ecosistema (¡si hay exceso de pulgones puedes aplicar aceite de neem, jabón potásico, o incluso la combinación de ambos en el plaguicida orgánico NK!)